
(Obtenga más información sobre las enfermedades mieloproliferativas en perros. Crédito de la foto: FatCamera/Getty Images)
Los trastornos mieloproliferativos en perros ocurren cuando la médula ósea está produciendo demasiadas celdas. Técnicamente, la condición se considera un tipo de cáncer de la sangre.
La condición produce una variedad de síntomas. Además, la enfermedad lamentablemente puede afectar a todas las razas de perros.
Lamentablemente, se desconoce la causa de la enfermedad.
Si ve signos de la afección en su perro, consulte a un veterinario para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados.
Esto es lo que debe saber sobre los síntomas, las causas y los tratamientos para la afección.
Síntomas de enfermedades mieloproliferativas en perros
La condición produce una variedad de síntomas. Por ejemplo, algunos de los síntomas más comunes. contener:
- anemia
- parecer letárgico
- debilidad
- perder peso
- infecciones
- Bazo agrandado
- hígado agrandado
- pérdida de apetito
- Fiebre
- depresión
- Ganglios linfáticos inflamados
- anorexia
- actuar agresivamente
Causas de las enfermedades mieloproliferativas en perros
(Crédito de la foto: Crédito: Jose Luis Pelaez Inc_
Lamentablemente, se desconoce la causa de la enfermedad. Esto significa que es idiopático.
Tratamientos para los trastornos mieloproliferativos en perros
Primero, su veterinario le preguntará acerca de los síntomas de su perro. En segundo lugar, su veterinario le preguntará sobre el historial médico completo de su perro.
En tercer lugar, su veterinario realizará un examen físico completo. También se realizan análisis de sangre y orina. Los resultados de las siguientes pruebas pueden mostrar anomalías en las células sanguíneas de su perro. Además, su veterinario puede usar rayos X para examinar órganos específicos que pueden verse afectados por la afección.
Desafortunadamente, no existe un tratamiento específico para la condición. Sin embargo, los antibióticos pueden ser efectivos cuando hay una infección. Como siempre, cuando su veterinario le recete un medicamento a su perro, asegúrese de seguir las instrucciones para la dosis y la frecuencia correctas. También completar todo el curso de medicina.
Los casos graves de la afección pueden requerir que su perro sea hospitalizado. Esto permite que su perro se beneficie de tratamientos como la fluidoterapia intravenosa y las transfusiones de sangre.
Además, la quimioterapia puede recomendarse en algunos casos. Su veterinario discutirá con usted si esta es o no una opción adecuada para su perro.
¿Alguna vez has cuidado a un perro que padecía esta enfermedad? ¿Cómo ayudó su veterinario a su perro a recuperarse? Háganos saber en la sección de comentarios a continuación.